INVESTIGACIONES EN EL LIMITE

PARTE FINAL: 6

HACIA LA HUELLA DEL PAJARILLO

 En ese instante le pregunto a Leonardo que me diera su opinion.

" Esto no es como la enloquecida ciudad  en la cual yo vivo, ( por ahora ), esto no es un sistema, esto es maravilloso.....en realidad hay que estar aquí, porque es difícil explicar este incomparable paisaje.......paisaje de ondulantes elevaciones, una agreste vegetación, y lo que es más desde acá arriba vemos deslizar al río, serpentear entre las piedras, pajas bravas y espinillos.".  Observo a Eduardo que se salía de lugar para expresar su emoción, y nos dice: " en realidad desearía que muchos estuviesen aquí para ver, para sentir este purísimo aire serrano, oportunidad que aprovecho para hacerle llegar la invitación a otro chivilcoyano, muy hermano nuestro, Tito, que decida su viaje a estos lugares ".

Bueno hermanos los invito a recorrer los últimos 20 metros, nuestro pechos explotaban de emoción, momento que consideramos hacer un alto, ahí, sentimos unos gritos, ( dirijo a los lectores a que vean la foto de la huella ), para que observen la posición, que en realidad parecía una olla gigante ), en la cima de enfrente, tres jinetes nos decian: UN POCO MAS ARRIBA........MAS, así llegamos al propio centro de la HUELLA,  levantamos nuestros brazos saludando y dando las gracias, en tan precioso momento.

Armamos un ligero campamento, donde Eduardo cumple su propósito, clavar su " katana ", en el centro de la huella, luego, nos fuimos armonizando, relajarnos, pero contagiados de entusiasmo, decidimos hacer unos mantras, los cuales, resonaron en el lugar y en nuestro interior. A la vez comenzamos a sentir como que algo llegaba a nuestro cuerpo, nuestros vibraciones personales se aceleraron, Leonardo me dice lo mismo y Eduardo saca varias exposiciones con su máquina. ( ver foto ).

En estos encuentros, en estos tipos de lugares, en estas situaciones, Seres Superiores, tratan de hacerse sentir, así aprendemos a sentirlos y escucharlos, nos entregan la sabiduría para que podamos entender a la " sociedad " que nos rodea, y también descubrir la belleza y misterios de la Naturaleza y del Universo..

Luego hicimos un prolijo examen del lugar, recogiendo tierra para un prolijo análisis, excavando por 8 a 10 centímetros y sacando algunas piedras que mostraban sus hendiduras con algo que nos llamó mucho la atención, que indudablemente se les escapó a la NASA......así llenamos nuestras mochilas hasta el tope.

Eran las 16 horas cuando decidimos emprender el regreso. Eduardo y Leonardo se deleitaban sacando fotos a varios lugares, mostrando la profundidad del valle, el volar majestuoso de unos aguiluchos, y bueno, también nosotros saludamos en idioma cósmico, y con algo de nostalgia, comenzamos a descender, apartando los pastos testigos mudos de aquel 9 de Enero de 1986. Así llegamos al lecho del río, desandando el recorrido anterior, y a las 16.50 hs. hicimos un alto, argumentando una " mateada ", pero en realidad queriamos expresar lo que sentiamos en nuestro interior..

Cuando descubrimos a pocos pasos, restos de lo que parecía una vivienda, y después de unos exámenes, concluímos que se trataba de un rancho o choza rústica, con 4 horcones dispuestos en cuadrado, sobre los cuales atravezaban palos, ramas y paja, para lo que fue un techo, mientras que las paredes semi-destruídas estaban hechas con tierra apisonada o adobes crudos. A su frente encontramos una gran piedra, un mortero, que mostraba una boca semi-circular con una profundidad cóncava determinada, que sin lugar a dudas usaban para moler o machacar con otro piedra alargada y cónica los granos allí puestos.

Con nuestro entusiasmo del hallazgo, no nos dábamos cuenta que el Sol ya había desaparecido tras un cerro, juntamos las cosas y de común acuerdo retomamos el camino rumbo a la casa de Manuel, que sin lugar a dudas, deberia estar intranquilo por nuestra tardanza. Así llegamos, viéndolo con una sonrisa acogedora, pero expresando su inquietud. Después de narrarle nuestra odisea, ( que está grabada ), cambiamos opiniones, donde Manuel pone de manifiesto sus conocimientos de la zona, en cuanto a la flora y la fauna del lugar, en ese momento, comienza allegar un aroma que nos envolvía, y al punto nos dice: vayan preparando mate que vamos a compartir algo.........y desapareció de la cocina. En instantes llega con un humeante pan casero que invitaba a saborear.

De esa manera entre mate, pan y mate, las horas avanzaron, cosa que decidimos comenzar a cargar nuestros pertrechos en el auto, preparándonos para partir rumbo a Capilla del Monte. Siempre se hace difícil narrar estos momentos, porque se juntan apretones de manos, abrazos, emociones que vibran más allá de nuestro ser. Manuel nos dice: VUELVAN HERMANOS que aquí estaré como un lucero del alba, brindando mi luz para para que ella sea guía de un nuevo día de Amor entre los hombres.

HASTA PRONTO.....Leonardo, Eduardo y Juan..........

FIN